El paso de los años y el conocimiento de la problemática consolidaron nuestra propuesta, que se volvió más compleja y que fue generando un modo de hacer y de pensar distintas actividades junto a niños, niñas y sus familias con la meta de lograr la restitución de derechos vulnerados y la promoción de condiciones de dignidad y felicidad para cada niño, niña y su familia.

Senado aprueba elevar la edad mínima para trabajar

Se sancionó el proyecto que modifica la Ley de Contrato del Trabajo y que permitirá la contratación de adolescentes a partir de los 16 años. Se espera ahora la aprobación de Diputados.

Buenos Aires (Télam).- El Senado aprobó anoche con modificaciones y devolvió a la cámara baja un proyecto de ley que modifica la Ley de Contrato de Trabajo para elevar la edad mínima de contratación que actualmente es de 14 años.
El proyecto acordado entre senadores de todas las bancadas impulsa que hasta el año 2010 se puedan contratar adolescentes de hasta 15 años y después de ese año, sólo a partir de los 16.
El texto legal, cuyo objetivo es erradicar el trabajo infantil, incluye tanto el trabajo industrial como el comercial y el agrario.
La norma impulsa el principio de "igual trabajo, igual salario", para lo cual modifica además un artículo de la Ley de Contrato de Trabajo que actualmente permite una menor remuneración para los menores.

Un reclamo unánime en el emotivo abrazo al vertedero: ¡basta de chicos trabajando!

Convocados por organizaciones sociales, unas cien personas concurrieron ayer al basurero municipal para exigir que no haya más chicos y jóvenes que buscan allí su sustento. Con un abrazo simbólico y una recorrida por el perímetro del vertedero se cumplió con la actividad. “El mensaje fue muy claro: todos estábamos ahí porque no queremos que haya chicos buscando comida”, resumió a ANB Elena Durón, de la Fundación Gente Nueva.
Una importante cantidad de vecinos respondieron al llamado de un grupo de entidades sociales que manifestaron su preocupación por la presencia de niños y jóvenes en el vertedero, y convocaron a esta manifestación bajo el lema: “¡No a los chicos en el basural!” El llamado fue realizado por referentes del Promeba, el CAAT 9; Salud Ambiental; ARB; Hospital Zonal "Ramón Carrillo"; Centros de Salud; DAPA; Escuela Inayen 343; Escuela Nuestra Señora de la Vida; CEM 97; Taller Angelelli; Fundación Gente Nueva; Juntas Vecinales y otras organizaciones sociales de Bariloche. Al término de la emotiva actividad –que permitió ver a familias enteras preocupándose por la realidad de chicos de los barrios altos de la ciudad-, Elena Durón de la Fundación Gente Nueva indicó a ANB: “La verdad es que estamos muy contentos, fueron bastantes personas, y fue un acto muy emotivo”. Resaltó que “estaba muy claro el motivo por el cual estábamos ahí. A pesar que hay que pensar en la situación del basural es muy compleja porque hay muchos actores e intereses que interactúan en torno a esta problemática, fue un encuentro muy limpio: estábamos ahí porque no queremos que haya chicos buscando comida, buscando metales para vender, o buscando juguetes”. Antes del comienzo del abrazo simbólico y la recorrida, las representantes de Salud Ambiental de la provincia y referentes del centro de salud del Barrio 34 Hectáreas, explicaron los motivos y el lema de la convocatoria. “La verdad es que nos dio mucho gusto a las personas que lo organizamos, porque a veces, quienes estamos metidos dentro de las organizaciones, no nos damos cuenta del apoyo que la sociedad nos puede brindar”, indicó Durón. Agregó emocionada que “había muchos papás y mamás que iban con sus hijos, familias enteras”. En relación a las acciones futuras, la referente de Gente Nueva aseguró que “esto no termina ahí (con la actividad de ayer). Me parece que tendríamos que tener una instancia en que todos los actores que trabajamos en el 34 hectáreas para hacer un mapa sobre cuántos chicos están trabajando, dónde viven, cómo, cuál es la contención que evidentemente no se les está brindando”. Durón destacó que “habemos muchos recursos y organizaciones que estamos trabajando; y hay mucha gente preparada trabajando en esta problemática”. (ANB)

Cerco humano al basural

Chicos, chicas y adolescentes de Bariloche entran al basural intentando encontrar respuesta a sus necesidades. Para que esto no suceda más un grupo de instituciones de la ciudad prepara un cerco humano al basural, y se reúnen hoy a las 10, 13 diciembre 2007.

Sabemos que algunos buscan metal para vender... Otros buscan juguetes o ropa... Algunos más buscan comida... Son chicos, chicas y adolescentes de nuestra ciudad que entran al basural intentando encontrar respuesta a sus necesidades. Nosotros no estamos de acuerdo y queremos que nos acompañes a decir: ¡ NO A LOS CHICOS EN EL BASURAL ! No estaría mal recordar que hace poco nos interpelaron al decir: "¿ Y a nosotros quién nos cuida ?" Unite en nuestro esfuerzo para que esto no suceda más, acompañanos a una reunión donde planificaremos un: Cerco humano al basural. Abrazo humano al basural.Hoy a las 10 se reúnen en el salón de usos Múltiples de la Dirección Forestal Andina, en Pasaje Gutiérrez 983, esqu Curuzú Cuatiá.Convocan: PROMEBA, CAAT 9, SALUD AMBIENTAL, ARB, HOSPITAL ZONAL "RAMÓN CARRILLO", CENTROS DE SALUD, DAPA, ESCUELA INAYEN 343, ESCUELA NUESTRA SEÑORA DE LA VIDA, CEM 97, TALLER ANGELELLI, GENTE NUEVA, JUNTAS VECINALES, ORGANIZACIONES SOCIALES.

Nueva Carta Magna prohíbe trabajo forzado y la explotación infantil

La nueva Constitución Política del Estado Boliviano especifica la prohibición del trabajo forzado y la explotación infantil y no impide que este sector pueda desempeñar voluntariamente actividades laborales remuneradas. En cambio el mismo artículo 61 garantiza sus derechos y mecanismos constitucionales de protección. En el artículo 61 de la nueva Carta Magna aprobada en grande establecía la prohibición de todo tipo de trabajo infantil, pero luego del análisis y sistematización por parte del Comité de Concordancia y Estilo se especificó los alcances de este punto.PROTESTA En la tarde de este lunes, representantes de la Unión de Niños, Niñas y Adolescentes Trabajadores de Bolivia (Unats) realizaron una protesta cerca de la Plaza Murillo exigiendo que se elimine el artículo 61 de la nueva Carta Magna. "El trabajo infantil es un problema del país, por eso planteamos que se elimine el artículo 61 parágrafo dos, que prohíbe el trabajo infantil. Incluso hay menores que son como padres para sus hermanos", dijo uno de sus dirigentes. Sin embargo, la Constitución aprobada en grande evidentemente establecía la prohibición del trabajo infantil, pero luego se especificó. Este parágrafo señala: "Se prohíbe el trabajo forzado y la explotación infantil. Las actividades que realicen las niñas, niños y adolescentes en el marco familiar y social están orientadas a su formación integral como ciudadanos y tendrán una función formativa. Sus derechos, garantías y mecanismos institucionales de protección serán objeto de regulación especial".

Aumenta el trabajo infantil en Gaza

Hace unos días nada más que se celebraron las conversaciones sobre las perspectivas de paz y esperanza para el futuro de los palestinos.
Pero para una generación de niños palestinos, las cosas sólo pueden empeorar.
En las calles de Gaza, aislada por el gobierno palestino y la mayoría del mundo, cada vez más niños son enviados a buscar trabajo.
Con un 70% de la población de Gaza viviendo por debajo del umbral de pobreza, los niños están siendo obligados a asumir el papel de sostén de sus necesitadas familias.
Las estadísticas muestran que el 7% de los niños en Palestina, donde el 52% de la población es menor de 18 años, están trabajando actualmente.
Un niño mecánico
Mohammad Nemir es un niño de 10 años que trabaja para un mecánico.
Dejó la escuela hace dos años y su trabajo en el taller no sólo ha cambiado sus sueños, sino también sus facciones. A pesar de su edad, Mohammad se encuentra con que es el único sustento para su familia de nueve miembros।Las pinzas y los destornilladores han sustituido a sus libros y juguetes, y así puede ganar unos 50 dólares al mes. Respecto al derecho natural de un niño a jugar con otros, Mohammad ya no puede disfrutarlo debido a su agotador trabajo. Y, sin embargo, no parece lamentar la vida que lleva.
“Dejé el colegio para ayudar a mis padres...No hay ningún otro que pueda sustentar a la familia y tengo seis hermanos...eligieron este trabajo para mí, y me gusta”, afirma.
La difícil situación de la madre
En busca de shekels, Rasha se pasa el día entre los coches y la gente, pidiendo a algunos y convenciendo a otros de que le compren algo para ella।Rasha está menos contenta con su situación.
“Vendo galletas, chicles o lo que sea...por eso no voy al colegio...no tenemos nada. Queremos comprar verdura para casa y medicinas para mi madre. Mi hermana tiene asma, así que tenemos que comprarle el respirador. Me gustaría ir al colegio y llevar uniforme como las demás niñas”, dice.
Hace cuatro años que Rasha y sus tres hermanos trabajan en la calle। Su padre abandonó la familia y su madre está enferma; quienes mantienen la familia son Rasha y sus hermanos y hermanas। La madre de Rasha afirma: “Me gustaría que mis hijos pudieran ir al colegio, pero no puedo mandarles a uno, ¿quién iba a mantenernos? Me vi obligada a enviarlos a la calle para que pudieran conseguir algún dinero। Estoy enferma y divorciada, y no tengo familia. No tengo a nadie, solo a Dios” . Estos son niños atrapados por la dureza de la vida, a los que se les ha arrancado su infancia y se les carga de responsabilidades que les agotan y dejan extenuados.
Y a pesar de todas las advertencias, no hay intentos serios de ayudar a estos niños y evitar el creciente fenómeno del trabajo infantil en Gaza
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HRW pide al gobierno chino la abolición del trabajo infantil en las escuelas públicas

La organización pro derechos humanos Human Rights Watch (HRW) pidió hoy al Gobierno chino que elimine el trabajo infantil en las escuelas públicas y advirtió de que el programa "Trabaja y Estudia" pone a cientos de miles de niños en peligro.
Human Rights Watch denunció que a través de ese programa se comenten "abusos crónicos", supone una "interferencia en la educación de los niños, carece de garantías de seguridad y sanitarias básicas e implica un trabajo peligroso y durante muchas horas"।

Aunque China prohíbe el trabajo infantil, el Gobierno de ese país "viola de forma activa sus propias prohibiciones, al gestionar programas a través del sistema escolar que utilizan el trabajo infantil y explotan las lagunas jurídicas de las leyes laborales nacionales", denuncia Sophie Richardson, subdirectora para Asia de HRW.
Bajo el programa "Trabaja y Estudia", regulado por el Ministerio chino de Educación, se anima a las escuelas en áreas empobrecidas a establecer actividades que generen ingresos para hacer frente a su déficit presupuestario.
HRW asegura, basándose en estadísticas del Ministerio chino de Educación, que unos 400.000 escolares, con edades entre 12 y 16 años, trabajan en programas agrícolas y manufactureros.
En 2004, el programa "Trabaja y Estudia" generó ingresos de 10।000 millones de yuanes (1.250 millones de dólares), precisa la organización.
La organización asegura que "algunas escuelas se han convertido en verdaderos talleres para elaborar productos de artesanía o alimentos, mientras relegan la enseñanza a unas pocas horas a la semana"।
"Las leyes y las obligaciones de China reconocen que los niños no deberían estar trabajando, pero el Gobierno permite el trabajo peligroso por parte de menores si la escuela lo organiza", añade Richardson, tras señalar que ese hecho pone en duda el compromiso del país con el objetivo de eliminar el trabajo infantil.

La infancia está en venta

Tráfico, trabajo infantil, abusos sexuales y el sida ensombrecen la vida de los niños del mundo.
Se calcula que 1।2 millón de jóvenes son llevados lejos de sus padres para usarlos en el comercio sexual.

Las autoridades chadianas adelantan procesos penales contra contra nueve ciudadanos franceses y dos chadianos por el secuestro de menores y fraude.
103 niños "huérfanos" serían llevados a Francia para ser adoptados por familias, todo a cambio de una suma de dinero para financiar las actividades de la ONG El Arca de Zoé, integrada por franceses expedicionarios de vehículos 4x4.
Hace cinco años, diarios latinoamericanos publicaron que nueve infantes guatemaltecos casi desnutridos fueron encontrados en una casa en Costa Rica cuando estaban a punto de ser vendidos a extranjeros.
Por esos días, otras cinco niñas que tendrían entre 40 días y nueve meses fueron rescatadas en Guatemala antes de ser entregadas a familias de Estados Unidos; y una red de traficantes, que había vendido tres niños chilenos a españoles, alemanes y franceses, fue desbaratada.
Estos son apenas algunos ejemplos del problema que representa la trata de niños en el mundo, y que también afecta a 1.2 millón de jóvenes, según cálculos de Unicef.
En el caso de América Latina, y más específicamente en el de Panamá, se hacen esfuerzos para contabilizar la actividad, pero aún no hay cifras al respecto.
Especialistas en el tema dicen que la mayoría de estos niños son sacados de sus hogares para posteriormente realizar trabajos sexuales.
Pero esta no es la única sombra negra que se cierne sobre la infancia feliz que merecen todos los niños del mundo, pues debido al abuso sexual, muchos deben vivir condenados a tomar medicamentos a causa del virus de la inmunodeficiencia humana, contraído cuando fueron forzados a tener sexo temprano. Aparte del peligro a que son sometidos por trabajar en oficios que ponen en peligro sus vidas y que no les permiten una educación continua como debería ser.
Se estima que el 20% de las mujeres y entre el 5% y el 10% de los hombres en todo el planeta han sido víctimas de abuso sexual en su niñez, y un alto porcentaje de personas cree aún en castigos corporales.
En 2005, según las cifras de Unicef, 2।3 millones de niños menores de 15 años vivían con VIH, 700 se habían infectado recientemente y 570 mil jóvenes perdieron la vida a causa de la enfermedad.
En Panamá, estadísticas de la OIT señalan que 9 mil niños indígenas –de entre los 10 y 14 años– trabajan en labores agrícolas , mientras casi 25 mil jóvenes –de 15 a 17 años– también están en el oficio.
En tanto, las cifras de trabajo infantil en la población no indígena reflejan que muchos niños son obligados a trabajar.
Este panorama ensombrece el derecho que tienen los niños –y que está consignado en muchos compromisos firmados por gobiernos de casi todo el mundo– a que se les dote durante su formación de lo necesario para garantizar una niñez feliz, y además que al crecer se conviertan en personas de bien dispuestas a impulsar el futuro de sus naciones.

Chile: el rudo trabajo de la niñez pehuenche

“Somos pehuenches, porque tenemos un mundo diferente। Por eso vivimos acá y no podemos ir a vivir a otro lado. No podemos dejar nuestra cultura, porque es la cultura que nos dio Dios”, dijo Luis, niño pastor, a Visión Mundial México.

En Chile, casi 200 mil menores de edad --más de 1 de cada 20-- trabajan para mantenerse y ayudar a su familia, según la Primera Encuesta Nacional de Actividades de Niños y Adolescentes. Ministerio del Trabajo. 2003.

Aunque esta cifra no muestra una participación masiva de las y los menores de 18 años en el mercado laboral, sí pone de relieve una situación que afecta a los más necesitados। De hecho, más de la mitad de estos jóvenes (107 mil) trabaja en condiciones inaceptables: no cumplen con la edad mínima legal para trabajar (15 años), no asisten a la escuela y trabajan más de las 40 horas semanales que establece la ley.

UN DÍA DE TRABAJO

Pedro tiene doce años y sus obligaciones comenzaron a las seis y media de la mañana। De un fuerte silbido llamó a sus perros, que, sin la menor demora, comenzaron a sacar las cabras de los corrales. Una gruesa capa de escarcha, caída durante la noche, cubría el suelo. Un mate hervido y un viejo chaleco de lana, heredado de su hermano, parecían bastarle al niño para calentar el cuerpo y el ánimo.

En el sector agropecuario, sobre todo en el centro y el sur del país, donde se concentran las tierras fértiles, trabajan 25 mil menores de 18 años de edad. Siembran la tierra, venden los productos que cultivan y se dedican al cuidado y pastoreo de animales.

En este tipo de labores, los varones duplican en número a las niñas, situación que también se observa en las formas de trabajo infantil más peligrosas y exhaustivas, donde 4 por ciento de los niños y adolescentes chilenos prestan sus manos, en comparación con 1।9 por ciento de las niñas.

Las familias pehuenches consideran que las actividades domésticas y agrícolas son parte de las obligaciones de los niños y de las niñas. No es trabajo infantil, afirman, sino algo propio de su comunidad y de su cultura. Esto puede ser cierto, pero también es cierto que muchos niños abandonan la escuela y con esto echan por tierra la oportunidad de llegar mejor preparados a su vida adulta.

Descubren explotación de niños en India

Activistas y policías allanaron una fábrica donde 14 muchachos bordaban prendas femeninas, lo cual pone de manifiesto la gravedad del problema de la explotación infantil Algunos de los menores tenían 10 años de edad, y provenían de un pobre distrito rural del otro extremo de esta nación। Los niños dijeron a las autoridades que nunca les pagaron por trabajar hasta 15 horas diarias bordando lentejuelas en saris para mujeres hindúes condiciones de trabajo y de vida en el taller textil, situado a algunas cuadras de donde se fabricaban ropas para Gap, eran muy sombrías. Ellos dormían apiñados en el mismo sucio cuarto en que bordaban durante el día.La transformación de India en una potencia económica durante los 90 muy poco ha hecho para aliviar la enorme pobreza que afecta a la mayoría.El Gobierno estima que unos 13 millones de menores trabajan aquí, muchos de ellos en industrias de gran riesgo personal. Tras conocer el hallazgo en esta nación, el grupo textil estadounidense Gap despidió al proveedor acusado de recurrir al trabajo infantil para la confección de un producto de su línea infantil GapKids y abrió una investigación para esclarecer lo ocurrido.

El 60 % del "cartoneo" en Argentina, a cargo de chicos de menos de 14 años

Las chicas y chicos de menos de 14 años que trabajan como "cartoneros" realizan el 60 por ciento de las tareas de recuperación y reciclaje de residuos en Argentina, según datos del último relevamiento oficial sobre trabajo infantil difundidos ayer (2/10) en un seminario que organizó la Comisión Nacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (CONAETI), la Organización Internacional para las Migraciones, la OIT, Unicef y Fundación Telefónica."Bariloche (Patagonia) está estigmatizado como un lugar para el turismo. Pero sobre la Ruta 40 hay un basural a cielo abierto donde en 2002 encontramos a 200 personas excavando, la mitad de ellos niños", dijo Elena Durón Miranda, de la Fundación Gente Nueva, de la provincia patagónica de Río Negro, que después de 5 años de trabajo logró recuperar a cien niños que terminaron la primaria.Unos 100 niños cartoneros que viven en la Villa 31, en el barrio de Retiro, junto a la estación de autobuses de Buenos Aires, dejaron el cirujeo y la recolección de residuos y volvieron al colegio, mediante un programa social que permitió a sus padres desarrollar microemprendimientos y fortalecer sus ingresos desarrollado por la oficina local de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) "Casi la mitad de los recuperadores urbanos en Buenos Aires son menores de edad y el 39 por ciento pertenece a familias migrantes", advirtió Cecilia Abregú, una de las coordinadoras del proyecto.

Implicancias políticas de la participación de los niños y adolescentes.

Según Enrique Jaramillo del Instituto de Formación de Educadores de Niños y Niñas adolescentes y Jóvenes Trabajadores de Perú, para democratizar, es necesario propiciar y abrir las puertas para la participación de los niños .Los adultos deben aprender a escucharlos y a darles mucho afecto y por sobre todo mucho amor, puesto que son el futuro y la esperanza de un país.“De ahí la importancia de promover la participación infantil, porque de no serlo así tendremos una sociedad cada vez peor que la nuestra, sino cultivamos a los niños. El Estado debe garantizar no sólo los derechos de los niños, debe garantizar y promover su participación y decisión”, puntualizó.

En el Centro Paraguayo de Educación Permanente Ko´e Pyahu, se realiza el Primer Congreso Nacional sobre “El Derecho a la Participación de la Niñez y Adolescencia en Paraguay ”, desde ayer y se extenderá hasta mañana, para analizar el avance en la participación de la niñez y adolescencia en Paraguay .En el encuentro participan niños adolescentes paraguayos y de otros países, comentó a Radio Viva Francisco Estigarribia de la Coordinación Nacional de Niños y Niñas Adolescentes Trabajadores. El mismo expresó en materia de legislación para el trabajo de niños y niñas, que avanzó la participación infantil en los espacios de debates referentes al trabajo mediante la legislación. Sin embargo, dijo que a nivel de decisión falta mucho por mejorar, pues se debe analizar y estudiar las decisiones conforme a las necesidades expresadas por los mismos niños adolescentes trabajadores y demostrar que la infancia es una prioridad y un tema importante en la agenda de un gobierno.Mencionó que se necesita reconstruir el concepto de participación, no pensado por los adultos. “Hablan de derecho, cuando en realidad lo que hacen es mentir con eso, hablan de estadísticas, de porcentajes y no de una realidad política, social y económica de la infancia. Los niños y adolescentes no somos consultados pero somos los primeros en sentir esa realidad”.“Nos limitan a trabajar, no tenemos condiciones para estudiar. Nos reprimen diciendo que no podemos trabajar, sólo a partir de los 14 años , cuando existe una ley que nos persigue y criminaliza el trabajo infantil”, finalizó el entrevistado.

Niñas mineras: pagos miserables para un trabajo riesgoso

México DF, 1 nov 07 (CIMAC).- En las zonas donde se encuentran asentamientos de minas de pequeña escala, en las que generalmente laboran familias completas, las niñas no sólo se enfrentan a los peligros que implica laborar dentro de una mina sino que además ven mermada su calidad de vida.

De acuerdo con el estudio Niñas en la minería: estudio en Ghana, Níger, Perú y la República Unida de Tanzania, realizado entre abril y diciembre de 2006 por el Programa para la Eliminación del Trabajo Infantil, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), las formas de remuneración que reciben las niñas por el casi siempre peligroso trabajo que realizan varía según el rango de ocupación y la zona minera.

Los estudios realizados en las minas de diamante y oro en Ghana señalan que el pago recibido por las niñas que ahí laboran es otorgado por el propietario de la mina o de la tierra, los compradores del producto de diamante o de oro, o los trabajadores adultos.

El acuerdo de pago general por el descubrimiento de minerales esta dividido de la siguiente manera: el 50 por ciento del pago es para la mina o el propietario de las tierras, el 40 por ciento para el minero (siempre hombre) que excavó el mineral y el 10 por ciento es compartido entre quienes cargan los minerales y mantienen limpio el sitio.

Sin embargo, menos de una tercera parte de las niñas que laboran en las minas se les paga por día, al 30 por ciento una vez a la semana, el 15 por ciento una vez al mes y una pequeña proporción se les paga sobre una base contractual.

Y las niñas que trabajan en la intermediación de venta de las piedras preciosas suele ser remuneradas por el comprador a la entrega. Y la cantidad que reciban dependerá del peso o volumen del producto. Si no entregan minerales no hay pago.

En Perú, las formas de pago difieren de acuerdo a la tarea que realizan, explica el estudio. Las niñas que ayudan a sus padres en la excavación generalmente no reciben una remuneración pues su trabajo es considerado como parte de sus funciones del hogar.

Las niñas que trabajan dentro de los centros de procesamiento (fusión y trituración de piedras) suelen recibir su pago íntegro por el trabajo que realizan y no son objeto de discriminación sexual. Sin embargo, usualmente hay una distinción, de acuerdo a la edad de la trabajadora: las niñas menores de 9 años generalmente no reciben un “salario” pero recibirán de sus padres un “bono” de compensación por su contribución.

Tensión en la Argentina

Condiciones sociolaborales en Argentina: su repercusión en los trabajadores infantiles

De los techos de los silos que caen sobre trabajadores, de los vagones que siempre llegan tarde y al fín arden, del trabajo desesperado de dos millones y medios de niñ@s trabajadores, de mas del 40% de los trabajadores en negro, del precio de la comida, de los que no podemos sindicalizarnos, de la ganancias no repartidas, de Techin, Rocca, Aluar, de las becas escolares que llegan a destiempo: un casi nunca, de los maestros en las rutas, de los tuberculosos y de la bronqueolitis, de los desplazados por la soja, de los niñ@s con otras lenguas primeras que echados de su selva mueren en esta ciudad, de los presos políticos y de los en proceso, de la sanción de la ley antiterrorista, de la pretendida ley sobre genocidios particulares, de los militantes populares que están en huelga de hambre, de los subsidios a la ganadería, al tomate y a la papa, de Jorge Lopez, de Fuentealba, de Marta Guillermaz, de las condiciones infrahumanas que soportan pensamientos: como en un mar, en la tensión superficial que contiene sus aguas, Argentina alberga un estallido.

Casi la mitad de la población mundial compone el universo de trabajador@s, así 2800 millones de personas constituímos la denominada población económicamente activa (con la edad cronológica para incorporarse legalmente al mercado de trabajo); sin embargo casi 250 millones de niños y niñas deben trabajar। La composición del universo de la fuerza de trabajo es mucho más amplia que la que se toman según los cánones legales. Un excelente dispositivo para ver esta composición de oferta y fuerza de trabajo bajo coerción es el mercado del trabajo en negro, del trabajo no registrado; sin ningún tipo de derechos laborales.

Los hogares cuyos adultos tienen trabajos en negro o se las arreglan con las llamadas changas en cuenta propia, componen los grupos donde encontramos a niños que cuidan hermanitos, acarrean agua, cocinan alimentos entre otras actividades dentro del hogar que son imprescindibles para la reproducción cotidiana de la fuerza de trabajo peor pagado del mercado laboral argentino y esto no es poco en un país cuyos salarios están en su piso histórico. Si incluímos en las cifras que contabilizan a los trabajadores infantiles en Argentina a aquellos que realizan trabajos domésticos, el número asciende a 2.500.000 de niñas y niños en nuestro país (Carola Abrales CTERA-OIT).

Como no ver que los veinte millones de personas que se encuentran por debajo de la línea de pobreza son producto de la valorización de la fuerza de trabajo en un marco de coerción económica: pensemos que la clase trabajadora perdió alrededor de un 24% del salario real promedio, mientras en el año ‘74 los asalariados recibían un 47% de la producción nacional, ahora no llegan al 14%. En tanto en el año 2001 la deuda equivalía al 62% del PBI y ahora, quita incluida, no menos que a un 80 o 90%: “Lo que hoy se presenta como un debate sobre los ingresos, que son las convenciones colectivas, en realidad abarca solamente a 2,4 millones de trabajadores sobre un total de 16 millones, esto es apenas el quince por ciento de la fuerza laboral”.(Claudio Lozano. Idep)

Ésta elevada sustracción de plusvalor en términos históricos en nuestra cotidianeidad tiene consecuencias que arrastran a una amplia mayoría de hombres, mujeres, adolescentes , jóvenes y niñ@s a la pauperización y embrutecimiento: la expropiación de capacidades básicas del ser humano como el pensar crítico, la transmisión de ideas, la creación de experiencias en ámbitos de estimulo y cuidado no deja ajena a las escuelas públicas que cada vez mas expresan procesos de segmentación entre distintas escuelas de un mismo barrio y mecanismos de fragmentación al interior de la misma, utilizando dispositivos de selección por raza, cultura y color quedando vedada la real discriminación por clase social.

El trabajo infantil en China

Las relaciones laborales en la República Popular China provienen de un inusual cocktail que amalgama lo peor del sistema comunista e impide cualquier tipo de libertad sindical. La situación limita los derechos para los trabajadores y los modos capitalistas que se aprovechan de esas condiciones para imponer la ley de la empresa en el mercado laboral.

Paralelamente se agrava el problema del trabajo infantil. Particularmente las industrias electrónica, textil, alimenticia, de los plásticos y los juguetes son las que más mano de obra infantil concentran, especialmente niñas, que son las menos escolarizadas. Se calcula que más de 9 millones de niños chinos trabajan en los sectores de la confección, fabricación de juguetes, de artículos deportivos y en empresas pirotécnicas.

Las jornadas laborales superan las 12 horas, sin descanso semanal.
Según un estudio de 2006 del Gobierno chino, un tercio de los inmigrantes rurales chinos ganaba menos de 500 yuanes (66 dólares, 49 euros) mensuales; alrededor de un 40 por ciento entre 500 y 800, y sólo menos de un tercio ganaba más de 800 yuanes al mes. Pero los niños encuestados para este estudio percibían de 300 a 600 yuanes mensuales.

Menores trabajadores llevaron voz y voto a presupuesto participativo 2008 en El Porvenir

Niños y adolescentes trabajadores de El Porvenir tuvieron, por primera vez, representación y participación, en la Reunión de Formalización de Acuerdos y Compromisos, realizada, en el marco del proceso de formulación del presupuesto participativo de la municipalidad del distrito mencionado, para el año fiscal 2008. La asamblea tuvo lugar en el auditorio del Centro Cultural Municipal, la tarde del viernes último.

La intervención de niños y adolescentes en el presupuesto participativo 2008 ha sido producto de las gestiones de Centro de la Promoción de la Mujer del Norte (CEPROMUN), asociación civil sin fines de lucro que promueve la defensa de los derechos de mujeres y niños en situación de pobreza y abandono, dentro de la ejecución del proyecto Colibrí: Promoción del Rendimiento Escolar en Niños y Niñas Adolescentes Trabajadores del Distrito El Porvenir.
La promotora social de CEPROMUN, obstetra Erica Undániga Lezcano, informó que El Porvenir presenta uno de los índices más elevados de trabajo infantil a nivel regional (22 %), entre seis y diecisiete años; y el 75 % de niños adolescentes realizan trabajo familiar no remunerado. “Hemos gestionado la participación de los adolescentes del proyecto porque creemos que es un espacio de concertación donde ellos pueden levantar su voz y visibilizar el problema de trabajo infantil, realidad que no ha sido tomada en cuenta”, reveló.
“Nosotros no somos el futuro -como los adultos piensan-, sino, ya somos el presente, exclamó Emily Vargas Gabriel (15), integrante del proyecto Colibrí, del CEPROMUN, y encargada de transmitir la realidad de los menores de edad que trabajan en su distrito. Junto a ella intervinieron las promotoras legales: Vicenta Rodríguez Zavaleta, Lesbia Aldana Bonilla y Elena Cisneros de Chullo, lideresas encargadas de visibilizar el trabajo infantil.
Para el presupuesto participativo, se seleccionó y capacitó a nueve adolescentes, de los cuales se eligió un agente participante titular y otro alterno. Los seleccionados recibieron asesoría técnica, por un especialista de la mesa de lucha contra la pobreza, así como capacitación en talleres, durante dos meses, donde aprendieron lo referente a presupuesto participativo, para que el problema de trabajo infantil sea incorporado.
De acuerdo a la prioridad y programación de proyectos de inversión de la Municipalidad Distrital de El Porvenir, el monto previsto para la elaboración del Plan de Atención para Niños y Adolescentes Trabajadores, en el año siguiente, es de 50000 nuevos soles, cifra que, según Emily Vargas, elegida segunda vocal del Comité de Vigilancia y Control del Presupuesto Participativo, debe mejorar. Que nos den más atención, que se preocupen por nosotros, enfatizó.

Valoración crítica del trabajo infantil

Consideramos al trabajo como una actividad humanizante . Todo lo que hay en este mundo es el producto del trabajo.

Consideramos al trabajo como derecho humano, y por lo tanto, también como un derecho de los niños y adolescentes. Esto implica respetar la decisión de los niños que por iniciativa propia salen a trabajar en un gesto de solidaridad con sus familias.

Consideramos al trabajo infantil como una instancia socializadora, educativa, organizativa, creativa y como instrumento que les permite ejercer sus derechos.

Estamos de acuerdo con el trabajo digno y no con la explotación, según el art. 32 de la Convención de los Derechos del Niño. El trabajo de la calle, aunque no puede ser considerado explotación, porque no hay un sujeto “explotador”, es un trabajo de supervivencia, tiene que ser protegido por los adultos, mejorando sus condiciones hasta que haya una alternativa diferente. Mientras tanto hay que acompañarlo, no prohibirlo. Se ha comprobado que la prohibición del trabajo infantil no lo elimina, sino que empeora sus condiciones.

Los nat´s , a través de su experiencia laboral, comienzan a sentirse capaces, útiles, productivos, responsables. La condición de trabajador se levanta como elemento fundamental en el desarrollo de su autoestima y como la identidad con la cual se identifican, como un factor que les revela que son alguien, que valen, que merecen respeto. Desconocerlo, negarlo y estigmatizarlo, es una de las formas más violentas de contribuír al empobrecimiento espiritual y material de los nat`s .

El abolicionismo y la erradicación del trabajo infantil son para nosotros inaceptables, ya que el trabajo es la actividad donde los niños se concretan como capaces de hacer, como sujetos de derechos.

El trabajo permite no sólo vivir del ingreso, sino también a preguntarse ¿por qué trabajo?, ¿porqué estas condiciones?. Les enseña a ser críticos. El trabajo es el punto de partida para crear conciencia e identidad, desarrollando otras vivencias y aprendizajes como actores sociales.

'Juega Limpio 2008' valora la reacción a su informe sobre trabajo infantil en los JJOO pero pide más medidas

La campaña internacional 'Juega Limpio 2008' (PlayFair 2008), organizada por la Confederación Sindical Internacional (CSI), la Federación Internacional de Trabajadores del Textil, Vestuario y Cuero (FITTVC), la iniciativa 'Ropa Limpia' y sus afiliadas y asociados de todo el mundo, valoraron esta semana el hecho de que el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 y las autoridades chinas hayan reaccionado a su informe 'Los Juegos Olímpicos sin medallas en derechos sindicales', pero pidió más medios para atajas algunos de los problemas concretos que detallaron en el documento. Dicho informe confirmó la utilización generalizada de horas extraordinarias por parte de tres de los proveedores que se ocupan de la fabricación del merchandising relacionado con los juegos, así como la utilización de trabajadores menores de edad y violaciones de los contratos de trabajo en el caso del cuarto proveedor, Lekit Stationary. Sin embargo, además de las excesivas horas extraordinarias, en el documento se mostraban evidencias de trabajadores a los que se les paga menos de lo estipulado por ley, falta de medidas relativas a la salud y seguridad de los empleados, dudosas prácticas de contratación, ausencia de la baja de maternidad o carencia estructural de mecanismos seguros para que los trabajadores canalicen sus quejas. 'Lamentablemente, en la declaración del Comité Organizador de los juegos se hace caso omiso de esas cuestiones, a pesar de que varios clientes internacionales de gran tamaño reconocieron que esos problemas son habituales en las fábricas', alerta la Campaña. 'Lo que hemos descubierto en materia de salarios, salud y seguridad profesionales, prácticas de contratación y otras cuestiones muestra que los problemas son mucho más profundos', añade 'Juega Limpio', y le reclama al Comité Organizador y al COI que publiquen el informe completo y discutan otras medidas para mejorar realmente la situación de los trabajadores.

Explotación infantil rumbo a Pekín 2008

PEKÍN (France Presse).— Los organizadores de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 anunciaron este martes que retiran la licencia olímpica a una empresa de papelería acusada de explotación infantil por el colectivo PlayFair 2008.La empresa, Lekit Stationery, es una de las cuatro acusadas de cometer "abusos", "ataques a los derechos de los trabajadores" y sobre todo "recurrir a la mano de obra infantil", según un informe del colectivo, formado principalmente por la Confederación Sindical Internacional, que integra 304 sindicatos de 153 países.El Comité de Organización de los Juegos Olímpicos (BOCOG) indicó en un comunicado la anunlación su contrato con la compañía, con sede en Dongguan, en la provincia sureña de Guangdong."Entre enero y febrero, Lekit Stationery recurrió al parecer a la mano de obra juvenil empleando a ocho niños escolarizados en tareas de embalaje no vinculadas a los productos olímpicos", según el informe.Además, "algunos de sus empleados no tenían contrato de trabajo", añadió el BOCOG.Las otras tres fábricas denunciadas por PlayFair 2008 podrán conservar su licencia, a pesar de algunos abusos como problemas de horas extraordinarias, porque no se detectaron prácticas de explotación infantil.Se espera que las concesiones de licencia olímpica reporten unos 70 millones de dólares a los Juegos Olímpicos de Pekín, según PlayFair 2008.

Latinoamérica: Diferentes miradas sobre el trabajo infantil

Cristiano Morsolin
Un estudio de la Plataforma NAT de Bolivia revela que entre el 25 y 33% del aporte que llega a los clanes, proviene de los chicos que trabajan; éstos sienten afecto por su familia, estudian y ahorran. El trabajo infantil se masifica como una espiral. Los NAT son actores sociales importantes, porque generan un aporte económico. “El trabajo es digno, aportamos a la sociedad, por eso, si se prohíbe el trabajo infantil nos afectaría. Hay niños que trabajan en este país, y eso hay que aprender a valorarlo”, enfatizó. De acuerdo con información del Censo de 2001, en la capital cruceña existe una población de 510.431 chicos desde los 7 hasta los 18 años. De esos, 48.000 niños, niñas y adolescentes están insertos en la fuerza laboral.No todos los niños y niñas y adolescentes que trabajan están institucionalizados, una buena parte lo hace por cuenta propia y sin ningún apoyo organizacional. Precisamente ese es uno de los retos, incorporarlos a las instituciones que protegen a este segmento de la población.
Los ingresos que logran los NAT y a qué lo destinan, si bien no son exactos, ya que están sujetos a algunas variables, pero contrariamente a lo que creen los adultos, estos montos están destinados a la sobrevivencia de la familia. También demuestra que se trata de un segmento con un gran potencial, que no está siendo aprovechado, puesto que la mayoría declaró su apego por las matemáticas, entre las materias escolares. “No son los marginados, los excluidos, sino gente con mucho potencial, y eso hay que saber aprovecharlo”, aseguró Rivero. Esto quizás se deba a la familiaridad que tienen con el manejo de las cantidades, debido a la naturaleza de su actividad laboral. El Gobierno de Evo Morales dice que tiene un Plan Nacional de la Niñez y Adolescencia que toca el trabajo infantil. El viceministro de Género y Asuntos Generacionales, del Ministerio de Justicia, Antonio Abal, señala que el diseño forma parte del Plan Nacional de Desarrollo, ejecutado por diferentes carteras de Estado. En lo que concierne a Justicia, promueve cambios en el Código Niño, Niña y Adolescente referidos al trabajo infantil. Señala que en algunos casos, como “colaboración de hijos a padres en labores agrícolas en el área rural y laburo de los lustrabotas en las ciudades deben ser aceptado y reglamentados para darles mejores condiciones”, contrariamente a los principios internacionales, como de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que prohíben el trabajo infantil. Abal argumenta, en el primer caso, que se tratan de formar culturales. “El país es diferente y eso tiene que estar reflejado en los marcos legales”. Sugiere que en vez de prohibir ese tipo de trabajo, se debe reglamentar qué es lo que pueden hacer los menores y establecer que eso no debe perjudicar su educación. En el segundo caso, el Viceministro informó que el 12 de abril se reunió con 160 niños lustrabotas de Santa Cruz para conocer sus inquietudes. Señaló que ellos le pidieron que no se les prohíba esa ocupación con la que se ganan la vida debido a la pobreza, sino que por el contrario se les respete y que las autoridades no los persigan. Así, la sugerencia es legalizar esa actividad para que los menores estén protegidos.